El Consejo Andaluz de Colegios de Administradores de Fincas ha recomendado la suspensión de todas las reuniones de propietarios. Sólo deben ser convocados para asuntos absolutamente importantes que no pueden ser pospuestos. Y sólo bajo las siguientes precauciones de seguridad:
- Aforo del espacio donde se desarrollen a un máximo del 75% de ocupación.
- Distancia social entre asistentes de 1,5 metros.
- Uso obligatorio de la mascarilla.
- Limitar la duración al mínimo tiempo necesario.
¿Está eso exagerado? La experiencia nos dice que no. En las condiciones actuales, es casi imposible celebrar una provechosa reunión de propietarios. El primer problema es el local. Por encima de un cierto número de personas es muy difícil encontrar una sala adecuada. Además de esto, está el fastidioso uso de la máscara. Puede que todavía se entienda la gente que le rodea, pero a una distancia mayor, que se da automáticamente por la distancia mínima, no se entenderán bien. Y sobre todo, por supuesto, el peligro de infección. El riesgo es grande, como han demostrado las experiencias de las últimas semanas. Todos los nuevos brotes se han formado durante reuniones o encuentros de varios tipos. Por lo tanto, nosotros, como administración, queremos seguir esta recomendación del Consejo y así proteger no sólo nuestra propia salud, sino especialmente la salud de nuestros propietarios.
¿Qué pasa si no se celebran reuniones de propietarios? Todo sigue igual. Los miembros elegidos de la junta directiva y la administración permanecen en sus puestos hasta que sea seguro celebrar una nueva reunión. De la misma manera, el presupuesto y las cuotas del año anterior simplemente siguen en vigor. Todas las decisiones se aplicarán en la medida de lo posible con las condiciones impuestas por la pandemia. De esta forma, la Comunidad podrá afrontar este período difícil sin problemas.